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Yo sé que le doy mil vueltas a todo. Soy consciente de que soy una persona llenísima de defectos. Y estoy convencida de que nosotros mismos somos nuestros peores enemigos. La soberbia, el orgullo, la envidia... son prendas en nuestro equipaje que solo nos hacen la maleta más pesada, pero no más útil.
Convivir con ellas es casi tan difícil como tirarlas a la basura y por eso nos limitamos a arrastrar nuestra pesada maleta viaje tras viaje.
Ayer hubo una tremenda bronca en mi trabajo. Sandra, una compañera nigeriana, se ha quejado de sus escasas horas de trabajo y ha insinuado que se la está "invitando" a marcharse porque hace unos días estuvo de baja. Los tres encargados del local le dijeron de malas formas que ella debía haber llamado para avisar o mandar un fax con el parte médico.
Sandra se defendió diciendo que había llamado pero le saltaba el fax, y que efectivamente envió la baja, para lo cual tenía un justificante de recibo.
Yo sabía que tenía razón. He llamado en muchas ocasiones y también me ha saltado el fax. El justificante era correcto y estaba segura de que el verdadero problema era que una de las encargadas lo había extravíado.
Los tres encargados gritaban intimidando a Sandra, pero ella se mantuvo tranquila, hablando con educación y despacio, lo cual acabó por sacarles más de sus casillas.
Los jefes nunca se equivocan.
Sandra se ha marchado a casa. Me cae bien, es una mujer amable y culta.
Pero yo no abrí la boca, me callé y no me metí en la trifulca, porque seguramente yo también estaría en la calle.
Hace años no habría dudado en meterme por medio y quejarme energicámente de esa injusticia, pero no sé a dónde han ido mis principios. Cada vez soy más cobarde.
Me cuesta mucho armarme de valor para enfrentarme a algo o alguien cuando sé que no me servirá de nada. Aún así a veces lo intento ... y siempre pierdo.
Pero toda mi cobardía no es nada comparada con mi remordimiento de conciencia.
Sin duda esa cobardía es otra prenda que he de sacar de mi maleta.
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Yo sé que le doy mil vueltas a todo. Soy consciente de que soy una persona llenísima de defectos. Y estoy convencida de que nosotros mismos somos nuestros peores enemigos. La soberbia, el orgullo, la envidia... son prendas en nuestro equipaje que solo nos hacen la maleta más pesada, pero no más útil.
Convivir con ellas es casi tan difícil como tirarlas a la basura y por eso nos limitamos a arrastrar nuestra pesada maleta viaje tras viaje.
Ayer hubo una tremenda bronca en mi trabajo. Sandra, una compañera nigeriana, se ha quejado de sus escasas horas de trabajo y ha insinuado que se la está "invitando" a marcharse porque hace unos días estuvo de baja. Los tres encargados del local le dijeron de malas formas que ella debía haber llamado para avisar o mandar un fax con el parte médico.
Sandra se defendió diciendo que había llamado pero le saltaba el fax, y que efectivamente envió la baja, para lo cual tenía un justificante de recibo.
Yo sabía que tenía razón. He llamado en muchas ocasiones y también me ha saltado el fax. El justificante era correcto y estaba segura de que el verdadero problema era que una de las encargadas lo había extravíado.
Los tres encargados gritaban intimidando a Sandra, pero ella se mantuvo tranquila, hablando con educación y despacio, lo cual acabó por sacarles más de sus casillas.
Los jefes nunca se equivocan.
Sandra se ha marchado a casa. Me cae bien, es una mujer amable y culta.
Pero yo no abrí la boca, me callé y no me metí en la trifulca, porque seguramente yo también estaría en la calle.
Hace años no habría dudado en meterme por medio y quejarme energicámente de esa injusticia, pero no sé a dónde han ido mis principios. Cada vez soy más cobarde.
Me cuesta mucho armarme de valor para enfrentarme a algo o alguien cuando sé que no me servirá de nada. Aún así a veces lo intento ... y siempre pierdo.
Pero toda mi cobardía no es nada comparada con mi remordimiento de conciencia.
Sin duda esa cobardía es otra prenda que he de sacar de mi maleta.
Comments (9)
En ocasiones es supervivencia... nos gusté o no, a veces hay que callarse porque por mucho que grites, el mundo no cambiará porque lo hagamos.
No hay más ciego que el no quiere ver.
Y respecto a tu cargo de conciencia... tampoco hubieses resuelto gran cosa, no es excusa pero ahora ya no sirve de nada que te autoinculpes de algo que no lo has provocado tú.
Somos cobardes... y nos hacemos aún más cobardes con el paso de los años... luchar contra ello no está mal, pero hay que ser inteligentes, es una supervivencia impuesta... puede ser sin pisar al de al lado pero primero iré yo y luego tú... un asquito... somos humanos no puedes esperar gran cosa de nosotros.
Los humanos sois muy variopintos. Débiles, fuertes, engreídos, humildes, soberbios, retraídos, generosos, orgullosos... a veces hay personas que reunen todas estas cualidades en una sola, por íncreible que parezca. Yo espero mucho de muchos humanos.
La verdad es que no pensaba en que hubiera cambiado algo, ni siquiera en que me hiciera sentir mejor. Se trata de ella. De que nadie la apoyó, del sentimiento de soledad cuando nadie te ayuda cuando sabes que la razón es tuya. No sé si me explico.
Mejor ignoradme, ya digo que le doy mil vueltas a todo ;P
Entiendo tu punto de vista, y si es cierto que cuendo sabes que tienes la razon lo que mas necesitas es saber que alguien esta contigo.
Pero es cierto que aveces hay querras perdidas antes de empezar y que no se puede hacer demasiado... Es una pena pero vivimos en un mundo Egorista y en michas ocasiones hay que serlo para poder sobrevivr.
Creo que por eso aveces los seres humanos se enarzan en proyectos que no son gran cosa que para otros no seran mas que una tonteria pero que para ti es algo en que entregar cuerpo y alma, y es por eso, como contrapartida a todas esas batallas que no podemos luchar.
Todos tenemos una maleta, en la que entran las cosas mas variopintas... aveces es como dijiste, el egoismo, envidia etc, otras esa melata se llenan de aparentes cosas buenas que en muchas ocasiones solo nos hacen el camino las doloroso, como porejemplo la capacidad de amar.
ooops... ¿sabeis lo que he encontrado hoy en mi maleta?
... un sandwich de nocilla...
ñam ñam! que rico!
Siempre nos quedará el azúcar para aliviar las penas, ¿verdad?
jajaja
Y las tartas de triple capa de chocolate!!!!
Jajaja la pena de ayer se me esfumo con fuerza esta mañana... la fuerza de esta mañana no me ha durado ni un dia... que triste, preferia haber sido cobarde, o conformista.
La cobardía a veces nos desalienta a todos, pues muchas veces se nos encarama al miedo y no hay quien se quite ni a uno ni a otro.
Si sólo fuesen en una maleta. Qué perfecto sería todo! El Mundo que grito existiría. La gente que odio, volvería a reencontrar el Camino del Amor...
Ais, que utopías creo sabiendo que nada existe realmente, que siempre reina el caos y el desorden.
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Sí, volveré a Madrid... Tengo mil motivos para volver, y sólo uno (aunque muy importante, no hay que esconderlo/negarlo) para quedarme.
Gana Madrid, y el viaje que quiero realizar -de nuevo quiero nortes- a Francia a mi regreso, en Octubre. No quiero recordar, ni observar las viejas a la vez nuevas fotografías isleñas...
Caminar, sin maleta aunque con mochila: a ver si me vuelvo a despojar de mis defectos.
Podríamos conocernos, hablar más de cerca.
Qué opinas?
Un abrazo.
...como me gustan los humanos...
*suspiro* Pero cuanta razón tienes en cuanto a la maleta llena de cosas inservibles en tu vida. Definitivamente creo que algún día me desharé de todos o casi todos mis defectos, en cuanto logré averiguar como lo hago =S
La vida está llena de injusticias, lamentablemente creo que el ser humano debe aprender a adaptarse a ellas, ya que parece ser que no va a cambiar en muchos años.